Historias de toda una vida

Cartas que agrada recibir

viernes, 11 de abril de 2014

MUJER APACIBLE Y ALEGRE



MUJER APACIBLE Y ALEGRE

Melilla. Miércoles 11 de abril de 2001

Querida hija, futura flacucha:
Rocío es una mujer agradable, apacible y alegre que todo lo hace de  buen grado y con simpatía, por lo que vivir a su lado es cosa grata, es vivir tranquilamente, gozando de perfecta paz. Estos elogios están, pues, plenamente justificados, son merecidísimos, y si las cosas son así, así hay que decirlas.

María, desparpajada charlatana, monopoliza las conversaciones, pisa la palabra a  los demás: Lista como el hambre, pero marimandona como el que más. El día que caiga en la cuenta de que el mundo es de todos será un encanto de criatura. No es que ahora  no lo sea, pero resulta, tal vez,  excesivamente posesiva y acaparadora. Siempre quiere estar en primerísimo plano.

¿Qué pasa, mocitas pintureras? Cada día envío un correo y vosotras calladas como difuntas. Bien está practicar el sublime arte de saber callar, pero no es este el momento. Por favor, hacedme el obsequio  de  alguna palabrita.

Tomo cuidadosamente de mis labios unos besos, los pongo en la palma de la mano y soplando los envío, cuando lleguen, aunque yo, según cierta  versión soy el mismísimo diablo, imaginaros que os ha besado un ángel.
Arrivedeire,

El gran jefe: tu apá