Carta no publicada en su día (no
recuerdo por qué) y reencontrada después de septiembre 2014.
Es evidente que en este lugar
queda fuera de fecha, pero queden también en ella reunidos todos vosotros,
todos vuestros cumpleaños y todos los buenos deseos que tras su partida
quedaron pendientes ¿Os parece bien?
DIANA FIESTA ONOMÁSTICA
Septiembre 17 de 2011
Diana, querida hija benjamina: Un día es un día y el
de hoy es especial, tan especial como lo eres tú para mí. Es también especial
por darse dos singulares circunstancias: nunca volverás a ser tan joven como
hoy, ni tampoco nunca has sido tan vieja. Pues bien, en este especial día tu
viejo pero florido padre te desea que seas feliz, feeliiz, feelicísiiima; que
pases un día divertido, optimista, alegre de cantar y reír. La risa es la
chispa de la vida; reír es higiénico, la única pega es que dicen que engorda.
Querida Diana, guapa y simpática muchacha, mira,
verás, si hay Dios en las alturas, que ojalá se dé la gozosa circunstancia de
que así sea, porque aunque haya quienes se empeñan en inyectar el virus de la
duda, su existencia parece una verdad científica. Mi progenitora, tu abuela,
así lo creía. Creía en Dios, ya lo he dicho, con la naturalidad con que creen
las flores, las mariposas, los pájaros, como en la salida del sol del siguiente
día y hablando del Creador se ponía radiante y elocuente. Pues bien, al
Altísimo pido que te envíe sus bendición para que en plan de ilusiones estés a
cien se hagan realidad tus más bellos sueños.
Este día que te corresponde ser feliz, lo serás doblemente
en compañía de Marina, preciosa hija tuya y nieta mía, mocita en flor, en la
edad del estirón, y, efectivamente, cada semana se nota claramente lo espigada
y lo bonita. Piragüista estrella con el merecido calificativo de criatura diez:
guapetona, espabilada, llena de gracia y alegría, contagiosamente simpática. Lo
dicho, chica diez.
Lógicamente, con el flamante título de campeona en su
categoría del piragüismo de Castilla y León te recordará tus días de campeona
de España de Gimnasia Rítmica, cuando eras una jovencísima muchachita que te
movías como junco con cintas, cuerdas, aros, mazas y pelotas al compás de
alegre música.
Por supuesto, igualmente serás feliz a la vera del
cacabelense, perfecto hombre de bien a quien deseo expresar con sincera
gratitud sus muchas y amables
atenciones. Lástima grande que no sepa disimular la envidia por que soy más
guapo.
Pues eso, Diana Cazadora, que ese día francamente
emocionante y feliz no te lo deseo únicamente para hoy, de especial manera para
el futuro que es donde vas a pasar el resto de tus días.
Se dice que la vida es un trocito de eternidad en
suspenso que dura un pispas. Ciertamente, la vida es corta y los días pasan
veloces unos detrás de otros, por lo que despreciarla es una tontería como un queso,
más bien lo que debemos hacer es procurar transformar este valle de lagrimas en
tierra de risas y alegría.
Diana de mi corazón, un torrente de salud y demás
cosas para que te permita ver la vida
como la imagen de la felicidad.
Besos y abrazos
Félix